RN40 - Día 5: San José de Jáchal

Final del día (10/01/2010)

San José de Jáchal es un antiguo pueblo fundado por los españoles desde el virreinato de Chile. Al menos eso es lo que cuenta Don Cabrera; un viejo de 72 años, con gran lucidez y capacidad de contar hasta el último detalle de la historia de toda la región durante el último siglo.
A Don Cabrera y sus amigos, Jorge M. y ... {no recuerdo su nombre}, los conocimos en el Dique Los Cauquenes. Jachaleros, los primeros dos -jachalleros, resalta Cabrera- y sanjuanino el último. Nos invitaron a almorzar compartiendo su comida y pudimos disfrutar de una jornada escuchando descripciones, historias y anécdotas del lugar.
Aunque bastante habían ya bebido, pudimos mantener conversaciones coherentes.
* Jorge: insistió en que un título es cada vez más indispensable para vivir cómodamente, y en que Charly García, Maradona y Mirtha Legrand son personajes nefastos a los que habría que liquidar: los primeros dos por incitar a la drogadicción; y la última, para que deje su lugar a alguien más joven.
* ... {no recuerdo su nombre}: insistió en que no hacía falta estudiar para llevar una vida digna y en que San Juan es una ciudad MUY insegura. De hecho, venía a Jáchal para descansar de la inseguridad en San Juan. Fue el que más bebió (¡más de una damajuana!)
* Don Cabrera: nos contó todo tipo de historias, desde el curso del río Jáchal a traves de los años, hasta que San Martín cruzó por aquí rumbo a Chile y fue en mula ya que en caballo no se puede pero que el caballo blanco lo pintan en Europa a los generales. Nos contó cómo cambió la ciudad con la fundación de la Escuela Normal, con la llegada del tren y cómo desaparecería con las minas que pronto aquí se abrirán.
Nos enteramos de que aquí cerca abrirán la mina de Pascua Lama (y otra cuyo nombre no recuerdo), que se sumará a las ya existentes a cielo abierto. Que contaminarán (como vienen haciendo) el agua con cianuro y que la mayor parte del oro irá para Chile, y los residuos para Argentina. Que aquí no la quieren. Que, culpa de las minas y la impericia de los sucesivos gobiernos, se está convirtiendo toda la región en un desierto ya que desaparecen los cursos naturales de agua con la construcción a mansalva de diques y la utilización (y envenenamiento) extensivo de agua en las minas.
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Estadísticas

Salida      : Lugar1 - HH:MMhs (km####) <- completar
Llegada     : Lugar2 - HH:MMhs (km####) <- completar
Combustible : ##,# ($##)                <- br="" completar="">
Alojamiento : $20 (los dos días)
Otros gastos: $71

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RN40 - Día 4: Embalse de Ullum

Final del día (09/01/2010)

Durante el día de hoy aprovechamos para reaprovisionarnos de comida, conseguir crema para quemaduras y guantes para evitar seguir quemándonos las manos (también conseguimos algo de papel y cosí la mochila).
Fue el primer día que comimos algo hecho por nosotros: sánguche de asado. La idea era comer la mitad al mediodía y la otra a la noche. Para eso guardé los platos con carne envueltos en una bolsa en el lugar más fresco que encontré -debajo de la carpa-; pero cuando los sacamos y pusimos en la mesa, ya saboreándolos, nos encontramos con una ingrata sorpresa: las hormigas se habían apropiado de nuestra cena.
Durante la tarde, luego de disfrutar del embalse un par de horas, salimos a pasear dejando la moto a un lado del camino e internándonos en la montaña para encontrar un majestuoso paisaje de más montañas (y más altas) pobladas de cactus y piedras de las más diversas formas.
En las laderas de cada una se percibían distintos estratos de piedras y tierra. Nunca imaginé que sería así. Ahora comprendo mejor muchas cosas que de niño aprendí en libros de geología. Al ver esos extraños suelos y formaciones rocosas, paisajes, hilos de agua, plantas, me planteaba muchas preguntas y respondía otras. No dejaba de imaginar y preguntarme cosas.
Al volver del paseo fuimos al embalse otra vez. Luego de nadar un rato alcancé a divisar unas nubes extrañas al horizonte hacia el sur. Minutos más tarde se veía como una niebla que cubría las montañas. La gente comenzó a salir corriendo del agua y yo no entendía nada. Mientras miraba extrañado lo vi llegar a Francisco que me contó que se aproximaba una tormenta de viento. Observamos hacia el sur y ya podía percibirse cómo avanzaba la niebla acercándose velózmente: en cuestión de minutos estaría encima nuestro.
Con mi hermano caminamos para preguntarle a la gente de qué se trataba ya que el pánico es contagioso y no saber a qué empeora las cosas. Los bañeros nos advirtieron que debíamos ir a cerrar y ajustar las carpas y guardar todo lo que hubiera suelto. En eso la tormenta ya estaba a 500 metros nuestro y no quería perdérmela: una gigantesca cortina de tierra se acercaba cubriendo todo el horizonte.
En cuestión de segundos llegó a la playa con una fuerza impactante que doblaba a los árboles y hacía tambalear a las personas. La tierra y piedras que arrastraba pegaban contra el cuerpo provocando dolor: parecía que lo pulieran a uno. También se dificultaba mirar porque las partículas que llevaba el aire entraban en los ojos.
Corrí a esconderme tras los árboles y por primera vez sentí temor frente a una tormenta. Es que jamás había visto un viento tan fuerte y estaba en un lugar por completo desconocido para mí. (Los humanos tememos a lo desconocido).
Pensé que si me quedaba allí me caería un árbol encima o quizá me golpearía algo arrastrado por esta especie de huracán. Y tampoco me atrevía a ir hacia la orilla del agua donde no había árboles ya que temía ser arrastrado por los cielos. Sin embargo corrí hacia la carpa (donde Francisco ordenaba todo) a buscar el celular para tomar fotos y bajé nuevamente decidido a adentrarme hacia el embalse pasando por el medio de la zona con más viento: no podía dejar pasar semejante oportunidad.
Siempre me maravillaron las tormentas fuertes, y hoy disfruté la mayor en mi vida. La arena impactaba contra mi cuerpo al cruzar y me empujaba hacia atrás. Tenía que cubrir mi rostro con los brazos.
Contra la orilla había gente (adiviné que eran de San Juan) y, cuando llegó Francisco le dejé mi ropa y corrí a meterme al agua para saltar en las olas. Allí no arrastraba arena pero sí gotas pequeñas de agua que también golpeaban muy fuerte. Luego de 15 min. ya había pasado la nube de arena y podíamos vérla alejándose hacia el norte.
Antes de terminar debo describir, al menos brevemente, el embalse. Eso fue lo que ayer dejé pendiente.
Las aguas del Embalse de Ullum, son cálidas y serenas. Muy limpias y con suaves olas que van hacia el norte. El color es turquesa (como las fotos de playas caribeñas) y se encuentra rodeado de montañas en todas las direcciones. Muy similar me resultó, a veces, al Embalse de río III; sin embargo la esencia es distinta.
No puedo escribir más ya que tengo mucho sueño.

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Añadido

No sé si lo mejor del día fue la tormenta, los paseos por las dunas o nadar por el embalse.

RN40 - Día 3: Embalse de Ullum

Final del día (08/01/2010)

Estamos en el Embalse de Ullum. Hoy recorrimos los más lindos paisajes desde que salimos:
* Mendoza, que superó nuestras expectativas. La ciudad más arbolada que conozco.
* El primer tramo de la RN40 árido y reseco, con paradójicos carteles alertando sobre el nivel del agua.
* San Juan: interminable y bella.
* Viñedos y olivares (y membrillares, perales, cebollales, ...) a lo largo de toda la provincia de Mendoza y llegando a San Juan.
Al embalse lo describiré mejor mañana ya que ahora sólo pienso en descansar.

Estadísticas

Salida      : La Dormida - 6:20hs (km3632)
Llegada     : Villa Ibañez - 13:50hs (km4005)
Combustible : 14,4l ($53)
Alojamiento : $110 (los dos días)
Otros gastos: $111


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Añadido

Verán que las notas de este día fueron más bien concisas. Esto se debe a que esta jornada alcanzamos el objetivo propuesto en el plan original: Embalse de Ullum para la tercer noche, para lo que hubimos de marchar a raudo paso unos 380km que dolieron mucho más que los 380km de la jornada anterior.
Mendoza fue tan fugaz que lo único que nos quedó de esta gran ciudad fue las ganas de regresar en otra oportunidad para conocerla mejor.
Cargamos nafta en una estación de servicio de las afueras y tratamos de no frenar en muchos lugares ya que un señor con el que Francisco entabló conversación en La Dormida nos había comentado que hay partes de la ciudad bastante peligrosas, y se quejaba bastante de la inseguridad.
Pero insisto, ambos nos quedamos con ganas.
Incluso pasamos sin frenar por una ciudad con importantísimo valor simbólico para mi: Guaymallén.
Fue la primera vez que ambos vimos las montañas, gigantescas moles de roca que se erigen en el horizonte para el norte y el sur, haciendo de barrera natural para separarnos de nuestro vecino país. Incluso algunas aún siendo verano tenían cubierta de nieve su cima.

RN40 - Día 2: La Dormida

Final del día (07/01/2010)

La Dormida es parte del antiguo nombre de mi ciudad, y el de aquella en que hemos caído a acampar hoy.
Llegamos exhaustos a las 15:30hs luego de preguntar por una estación de servicio con duchas en La Paz. Me sorprende que el nombre de las ciudades elegidas para ello sean "La Paz" o "La dormida".
Los 380km que recorrimos hoy atravesaron inhóspitos páramos sin sombra en la que parar a descansar: la flora se compone básicamente de arbustos espinosos y la fauna, de hormigas y mosquitos. Algún que otro carancho vuela encima nuestro de vez en cuando en reemplazo de las numerosas bondades del ecosistema de ayer.
Ya en la provincia de Mendoza tuimos el primer susto con la moto al ver que perdía mucho aceite: pensamos que el motor se había roto por la alta exigencia y el calor. Afortunadamente ambos problemas eran sólo de sus pasajeros. Sólo se trataba de que estaba floja la tapa del aceite.
Escarmentados, aceitamos y ajustamos las cadenas y alforjas. Además la revisamos para prevenir que vuelva a suceder.
* Ya encontré una analogía para describir el dolor que siento: es como si me hubiera golpeado muy fuerte el último hueso de la columna (huesito dulce).
* Nos divertimos mucho jugando a las bochas con piedras en la playa de estacionamiento de la YPF.
* Me voy a dormir, ya son las 21:30hs y debemos levantarnos a las 4:00hs

Estadísticas

Salida      : Vicuña Mackena - 6:40hs (km3250)
Llegada     : La Dormida - 15:30hs (km3632)
Combustible : 9,1l ($50)
Alojamiento : $0
Otros gastos: $42,25


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Añadido

Ese día, según nuestros planes, debíamos haber frenado a descansar en Mendoza, unos 90km hacia el este; pero el dolor insoportable en la espalda nos impedía continuar. Estando mucho más cerca de Pergamino que de La Quiaca, y sin haber resuelto el problema del dolor, pasó por nuestras cabeza la fugaz idea de que quizá no llegaríamos a destino.
El estar tan cerca de conocer al menos las montañas en Mendoza nos impulsó a seguir un poco más.
Algo que hizo muy ameno el viaje esta jornada fue que transitamos mayormente por una autopista en la que circulaban camiones de gran porte (rumbo a Chile, suponemos). Y cada vez que alguno nos alcanzaba, nos ubicábamos detrás a muy poca distancia para que nos tape el viento (de hecho no se sentía ni una brisa) y así poder ir conversando un rato.
Esto fue algo imprudente y peligroso, pero nos ahorró bastante dolor de espaldas y dinero en nafta. Sin embargo, creemos que fue la causa de que la moto se calentara tanto ya que no circulaba el aire fresco por el motor.
Lo que nos llamó la atención es la velocidad de los camiones. A veces, para mantenernos a su paso, había que ir a 120km/h; incluso en una oportunidad, el camión al que seguíamos, sobrepasó a otro que iba a más de 100km/h yendo a 140km/h (la moto a duras penas se mantenía a esa velocidad).
Dejamos nuestro agradecimiento a los camioneros que nos aliviaron, sin saberlo, el viaje por más de 100km: GUY-15? (Don Ernesto) y GUM-68?.

RN40 - Día 1: Rufino

Primer descanso

Llegamos a Rufino y, con el cuerpo (de ambos) a la miseria, decidimos que frenaremos antes de Fraga debido a que ya no llegamos.
Probablemente acampemos en Vickuña Mackena.
Es un suplicio tener que llevar la mochila a cuestas: el tramo que me tocó a mi iba mirando contínuamente el cuentakilómetros para ver si así pasaba más rápido. Cada 50km frenamos a estirar las piernas porque, de otra forma, se hace imposible llegar. (¡Y eso que vamos por el tramo más sencillo, el de la llanura!).
Calculamos que hasta ahora hicimos 100km cada 1:30hs.
En 5 minutos partimos.

Final del día (06/01/2010)

Estamos por tomar unos mates antes de ir a dormir. Finalmente debimos frenar en Vicuña Mackena. Descansamos y deliberamos en la plaza central y luego averiguamos por un lugar para dormir, con lo que nos mandaron a la estación de servicio "MyM" (saliendo de la ciudad por RN7).
Nunca me había bañado en una estación ni cronometrado (7 minutos por $2), pero llegué y me sobraron dos minutos, que utilicé para relajarme un rato.
Verdaderamente fue muy agotadora la jornada; aunque es probable que ello se deba principalmente al fuerte viento: había muchísimos árboles tirados partidos al medio y de raíz. Sin embargo debo admitir que el dolor causado por llevar esa mochila no me impidió disfrutar del panorama de extensas llanuras inundadas con pequeñas lagunas cuyos cielos eran surcados por bandadas de garzas y patos.

Estadísticas

Salida      : Pergamino - 10:30hs (km2974)
Llegada     : Vicuña Mackena - 18:50hs (km3252)
Combustible : 26,6l ($96)
Alojamiento : $0
Otros gastos: $61,8


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Añadido

En esta sección añado algunos datos que voy recordando y no pertenecen al cuaderno de viaje original.
* Partimos una hora más tarde de lo previsto, olvidando llevar algo (la banda reflectora y algo más que no recuerdo).
* Al partir de Pergamino nos despidieron desde el galpón de nuestra tía (Leandro filmó un video que en algún momento subiré aquí) y unos amigos de Francisco nos acompañaron en auto hasta Colón.
* Íbamos con un fuertísimo viento en contra y a ambos lados de la ruta se encontraban inmensos árboles caídos y algunos terrenos inundados que, junto al viento de ese momento, nos hacían estar alertas para tratar de que no nos agarre desprevenido cualquier tormenta.
* La primera parte de la bitácora la escribí mientras comíamos unos choripanes en Rufino, tirados en el piso sin poder movernos y con la espalda por completo adolorida. El no haber practicado bien antes de partir las posiciones de manejo y demás nos jugó en contra, además de que la moto vibraba demasiado por el esfuerzo. Con los días supimos solucionar estos problemas en gran medida.
* Llegamos cansadísimos a Vicuña Mackena, donde descansamos en un parque de árboles altos y frondosos, alejados de la estación unos 50 metros y de la ruta, unos 100m. El lugar era cómodo y tranquilo, tenía unos troncos que usamos como silla o respaldo.

Ruta Nacional 40 - Introducción

Con este post los introduciré al relato de la odisea en que nos embarcamos con mi hermano durante casi todo el mes de enero de este año.

Luego de adquirir la motocicleta Gilera YL275 en enero del año pasado, viajábamos con mi primo y hermano cada vez que iba a Pergamino. A veces el destino era Pinzon, otras Alfonzo, otras "El descanso" (descanso a la vera de la RN8, a mitad de camino entre Pinzon y Alfonzo). Siempre cerca de Pergamino.

El objetivo de estos viajes era:

• asentar el motor de la YL275;
• tomar mates en lugares tranquilos;
• y pasear en moto (nos encanta).

En una oportunidad se planteó (ya no recuerdo quién fue) la idea de un viaje largo y difícil. Pasó un tiempo y yo, desde Buenos Aires, comencé a investigar destinos de turismo aventura por nuestro país que cumplan con los requisitos de nuestro plan.

Allí fue cuando descubrí la Ruta 40 y planteé recorrerla toda desde un extremo a otro durante un mes. Sin embargo, al revisar bien la propuesta, descubrimos que eso significaría viajar grandes distancias por jornada sin posibilidad de disfrutar adecuadamente cada lugar que visitáramos. Es por ello que nos propusimos el recorrido: Pergamino -> Mendoza -> La Quiaca, siendo que este último tramo se recorrería íntegramente por la famosa ruta.

Así fue que nos reunimos varias veces, conseguimos folletos, mapas, calculamos costos, propusimos diversos recorridos (ruta 40 vieja versus nueva, desvíos para poder visitar algún lugar, etcétera), desertamos -mi primo-, adquirimos todo lo que consideramos necesario (sogas, mochilas, ropa, botiquin, alforjas, etc) y planteamos los puntos donde nos detendríamos a descansar o a cargar combustible.

Todos los detalles del viaje, incluídas fotos y videos, serán publicadas en este blog en varias entregas semanales.

Espero que la anécdota sirva para describir lo más fielmente posible los lugares visitados de modo de colaborar con quien no pueda realizar una excursión como esta, que otorgue información valiosa a quien esté planificando viajes similares, que me ayude a rememorar los buenos momentos de la travesía y que les agrade.

¡Saludos!

Presentación

Como casi cualquier otro blog, la primer entrada de Bitacoritas es la presentación.

Mi nombre es Chango, me gusta mucho viajar y tengo como tradición escribir cuadernos de bitácora en cada una de mis vacaciones. Por supuesto que en todos los casos en que se trate de viajes en familia -que son la gran mayoría, porque es mi costumbre- en un medio propio.

La idea de abrir un blog donde publicarlas se me ocurrió en mi último viaje, una gran aventura por la Ruta Nacional 40 (Argentina) con mi hermano; por lo que no necesariamente las bitácoras sigan un orden cronológico.

Espero que a alguien le sirva como ayuda para sus vacaciones o que acerque las aventuras a quien no puede darse el gusto de vivirlas.

Cualquier crítica, comentario o consulta será siempre bienvenida siempre (salvo que se trate de temas ajenos al blog).

Finalizo la presentación y en breve estaré publicando la primer parte del cuaderno de mi último viaje.